martes, 3 de marzo de 2009

CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA O COMO PERDER UNAS ELECCIONES TRAS UNA BUENA GESTION


Santiago Nasar el personaje de García Márquez, no supo que iba a morir asesinado, pero todos los demás lo sabían, si bien todos se lo callaban. 
Emilio Pérez Touriño, ha sido un buen presidente y ha hecho una buena gestión. No merecía perder la presidencia, por su gestión merecía la mayoría absoluta. Pero muchos sabían que iba a perder y todos se lo callaron.

Quienquiera que haga un análisis riguroso de la gestión del bipartito en Galicia, concluirá, que la gestión fue buena y en muchos casos patente, como en obras públicas, sanidad, trabajo, medio ambiente, educación y bienestar.

¿Cómo se explican los resultados del primero de marzo?

Primeramente quisiera pararme en la participación. En las autonómicas de 2.005 muchos votantes de derechas se quedaron en casa por vergüenza (Prestige, guerra de Irak, edad del candidato, etc), en esta ocasión los que se quedaron fueron los progresistas desencantados por varios motivos:

La evidente bicefalia, que hacía patente las discordancias hasta en el nombre de la autonomía. Mientras el Presidente hablaba de Galicia, el vicepresidente se refería a Galiza. Y no olvidemos las diferencias  que deberían resolverse dentro del Consello de la Xunta, que trascienden a la opinión pública, como el caso de las eólicas (a un mes de las elecciones). Otros dieron por ganadas las elecciones y no se movilizaron. Otros se justificaron con el carácter distante de Touriño. Y en menor medida el fenómeno coyuntural de la crisis y el paro.

El PP supo movilizar a los suyos combinando las viejas y las nuevas tecnologías, llegando así a los mayores y a los más jóvenes.

Llamo las viejas tecnologías a la red clientelar  afecta al partido popular,  formada por Ayuntamientos y Diputaciones, Centros privados o concertados de Sanidad y Educación, Asilos, Iglesia, que además de incidir directamente sobre sus supeditados , se valía de muchos funcionarios de la Xunta o de las Diputaciones socialistas, que por afecto o por pago a los favores recibidos, allanaban el camino a las demandas de los validos del PP y ponían piedrecillas  en el camino a las demandas de los dirigentes de los partidos del Gobierno, dando la impresión de que los populares nunca habían perdido el poder.

 Las nuevas tecnologías fueron la utilización del móvil e internet para enviar consignas impactantes a los jóvenes, manejando una ambigüedad calculada, como el despilfarro de los sillones, el coche del Presidente o el conocido como Villa psoe, Este último de gran impacto en las provincias costeras, afectadas por una estricta Ley de Costas. En multitud de vídeos que circulan por la red se implica a José Blanco y otros dirigentes socialistas de construir una segunda residencia en un lugar paradisíaco en la Illa de Arousa, incumpliendo la legalidad. Eran mentiras, que acabaron calando y movilizando el voto a favor del PP y explica la caída del voto socialista en estas provincias.

 

Sito Vázquez