jueves, 10 de julio de 2008

Malgastando credibilidad¿CRISIS ECONÓMICA? SÍ



El mayor error que pudo haber cometido el gobierno de Rodríguez Zapatero, previo a las elecciones de marzo (08) ha sido minimizar los efectos de la situación económica global sobre nuestra economía, pienso que por miedo a la repercusión en el resultado de los referidos comicios.


El exceso de optimismo demostrado por el ejecutivo y muy en especial por su presidente fueron interpretados por la ciudadanía como electoralismo, como lo fueron también los 400 €.


Es tan malo no llegar como pasarse. Personalmente considero que esta manera de ir sobrao, le ha restado votos, porque:


Todos éramos conscientes de que la burbuja del ladrillo iba a estallar en cualquier momento.


Todos éramos conscientes de que los precios de la vivienda eran excesivos para los salarios medios.


Todos éramos conscientes de que los jóvenes suscribían hipotecas a 30, 40 ó 50 años, que les llevaba a un equilibrio presupuestario inestable.


Todos sabíamos que la desenfrenada ascensión a los cielos de los precios del petróleo, generaría alza en los precios de alimentos y materias primas.

Y todos sabíamos, que tarde o temprano habría que hacer ajustes, para paliar en lo posible los efectos de la tormenta que se avecinaba.


Sabiendo todo esto, el gobierno confundiendo la Hacienda Pública con los españoles, alardeaba de superavit. Pero los ciudadanos desde el verano de 2007 comenzaron a constatar que tenían agujeros en los bolsillos por donde se les iban los euros y cada vez les resultaba más dificil mantener su nivel adquisitivo.


El Ministro de Economía y el equipo económico que le asesoraba eran muy bien valorados y gozaban de prestigio ante la sociedad. Es decir tenían ese bien tan escaso en política que llamamos credibilidad.
Pedro Solbes, Ministro de Economía y Hacienda

En ese momento, argumentando con las premisas expuestas había que adelantarse a los hechos consumados, coger el toro por los cuernos y decirle a la sociedad con todas las garantías que da esa credibilidad: "Señores, esta es la situación. Hay que tomar estas medidas antes de que sea demasiado tarde".


Hablarle claramente al pueblo no significa un riesgo electoral, más bien todo lo contrario, ( ¡que lejos queda el 14 M!), los ciudadanos lo comprenderían, pues sabían que la mayoría de las variables se escapaban a las competencias del Gobierno y que la gestión de los ministerios económicos había sido correcta.


Esta falta de iniciativa en su momento y el exagerado optimismo le restaron credibilidad al equipo económico y al propio presidente.

Ahora se están viendo las consecuencias: las propuestas del ejecutivo no llegan o no son valoradas.

Resumiendo en materia económica el gobierno ha perdido la credibilidad, por empecinarse en disfrazar la realidad.

martes, 1 de julio de 2008

CAMPEONES ¡SÍ.SÍ.SÍ...LA COPA "PA MADRÍ!"



Ayer día treinta de Junio me enganchó la televisión en el momento emotivo de la llegada de los componentes de la selección española de fútbol a la capital de España.

He de reconocer, a pesar de mi poca devoción por este deporte, que el acto ha sido de lo más auténtico, capaz de transmitir esa alegría contagiosa que te llena el pecho y te hace bailar las lágrimas en el borde de los párpados.

¿Que ha hecho que este acto se haya convertido en algo inenarrable?:
La sencillez y la espontaneidad que han demostrado todos sus protagonistas. Han hecho de esa espontaneidad un acto espectacular.

Distintos acentos, distintos tonos de piel, distinto sentido del humor; pero todos eran uno en su diversidad.


Como "una piña", se decía de esta selección. Me parece una metáfora excelente, aunque la piña, o precisamente por eso, solo tiene un corazón interior que une las distintas escamas, pero en el interior de las escamas se encuentran los piñones con sus membranas como alas de insectos, su cáscara y la semilla, y a todo esto hay que sumar la resina que manan las escamas.

Y aquí me quería parar, para hacer una reflexión que va más allá de lo meramente deportivo:

En el acto de ayer además de los distingos señalados se han visto gestos y distintivos, que sencillamente no me han agradado y que pueden resultar ofensivos para muchos españoles que a pesar de su alegría por el triunfo de la selección, esta no puede ser completa porque siempre hay gentes dispuestas a aguarles la fiesta pues son considerados españoles distintos.

La inmersión en la dictadura franquista han creado hábitos o tics, que a estas alturas muchos ciudadanos no hemos superado.
Uno de los tics que persisten es la identidad del español. Hay mucha gente que divide a los españoles en patriotas, en el sentido que el viejo régimen consideraba ser buen español, es decir: católico, castellanoparlante, chauvinista, hipócrita y del Real Madrid y los antipatriotas que con distintos calificativos somos todos los demás.


Me estoy refiriendo a todos los que se sentían molestos con aquellos que gritaban ¡sí, sí, sí...la copa "pa Madrí". Aunque retóricamente puede considerarse una metonimia, lo cierto es que es ofensiva para el resto de los españoles malos patriotas.



Por otro lado hubo un futbolista que gritó en dos ocasiones (que yo escuché) :¡Arriba España!. Supongo que no sabía las connotaciones que tales palabras tenían (tienen). Me chocó el anacronismo y pensé que lo que quería decir era ¡Aupa España!. Aunque no dejé de considerar el deterioro que determinados hechos históricos pueden suponer en el significado de las palabras.
Sergio Ramos en el centro con una bandera de Andalucía rodeando su cintura

Otro jugador iba envuelto en una bandera de Andalucía, lo cual me pareció muy bien, pues que sientas el orgullo de tu tierra y lo manifiestes, para nada quita que sientas el mismo cariño por tu país.
He leído varios diarios, escuchado la radio y visto la televisión y no encontré un solo comentario sobre estos hechos, que en sí no tienen mayor importancia, como tampoco la debieran tener si los asistentes gritasen algo así como ¡Toma, toma, toma...la copa "pa barselona"!, un jugador gritase ¡Viva la República! o se envolviese en la ikurriña.

Siendo lo mismo, estoy seguro de que serían juzgados de distinta manera y condenados al ostracismo.